domingo, 3 de abril de 2011

Un Paseo Por Ronda


     
      Salíamos temprano de nuestra Villa de Rota hacia el interior,  hoy las predicciones no eran favorables, el hombre del tiempo había pronosticado que en la zona de la provincia de Málaga habría un 30 % de probabilidades de lluvia, esto sumado a la celebración del Gran Premio de Motociclismo en Jerez hizo que estuviéramos alerta durante la jornada.

      Poco antes de llegar al cruce de Zahara-Algodonales ya sospechábamos que había sucedido algún accidente, un motorista nos alertaba que debíamos bajar la velocidad,  varios vehículos y un par de ciclomotores se habían visto implicados, el panorama era dantesco, había habido muertos, aún con la intranquilidad de haber pasado por una situación de pánico llegamos a la Venta El Molino para desayunar.




     El día estaba completamente cerrado, las predicciones del 30 % de agua nos cogió de lleno, pero no nos importaba mucho, tras el desayuno continuamos hasta Ronda, una ciudad que es un monumento en sí misma, conserva un patrimonio histórico único, la parte antigua, conocida como “La Ciudad” es la zona más importante de la localidad.


     La Iglesia y Convento de la Merced fue lo primero que visitamos, en el S. XVI pertenecían a la Orden de los Mercedarios, hoy lo administra la Comunidad de Carmelitas. Construida en tres naves y cubierta por bóveda de cañón con lunetos y fajones, el coro se levanta sobre un arco carpanel y el crucero lo cubre una bóveda rodeada de pequeños ventanales con cristalería de colores, la luz entra por ellas haciendo de prisma y la sensación es de paz y serenidad.


     En su interior se guarda celosamente la mano de Santa Teresa de Jesús, que antes de la Guerra Civil se conservaba en Ronda y en la contienda militar fue sustraída y trasladada a Málaga, allí fue encontrada por las tropas del bando nacional y entregada al General Franco, que la conservó hasta su muerte en el Palacio del Pardo en Madrid, después de su muerte la reliquia volvió a la ciudad rondeña. Adivinen donde esta esa reliquia, supuestamente en el interior de toda esta ostentosa decoración. La fachada del templo es de mampostería dividida en pilastras de ladrillos, el portal decorado con arco de medio punto, la torre es de planta octogonal.

Ciclamores en flor - Árboles del Amor

Magnolio Chino - Árbol Tulipan



Sierra de Juan Diego y El Hacho de Montejaque
 las nubes tapa el Parque Natural de Sierra de Grazalema



     Atravesamos la alameda para asomarnos a la serranía, la primavera se hacía notar y las vistan eran espectaculares a pesar de la nubosidad, continuamos por el paseo de Ernest Hemingway pasando por el Teatro de Vicente Espinel para llegar a la Plaza de Toros y continuar por el Paseo de Blas Infante hasta la glorieta de Miki Haruta, pintor japonés que vivió hasta su muerte en la ciudad.




Glicinia - Flor de la Pluma - Wisteris Sineasis


 Una esquela a los pies del monumento nos anuncia
 “Nací para morir, muero para vivir”.


    
      Hasta ahora el tiempo no estaba dando una tregua, pero comenzaba a chispear, rodeamos el Parador para llegar al impresionante Tajo.


    
      El Tajo de Ronda es el paraje más visitado de toda la provincia de Málaga, la cima visual de una ciudad que parece colgada del cielo. Se trata de una garganta de casi cien metros de profundidad excavada por el río Guadalevín sobre la que se alza, entre otros, el Puente Nuevo, el verdadero emblema de esta ciudad serrana, objeto de culto de innumerables artistas y poetas.

  
   Construido entre 1751 y 1793 por el arquitecto José Martín de Aldehuela y dirigido por José Díaz Machuca, más de 40 años hicieron falta para construir este  monumento de 70 m. de largo y 98 m. de alto, debido a la peligrosidad del terreno.


     Tal es su belleza que cuenta la leyenda que José Martín de Aldehuela murió al arrojarse al Tajo de Ronda desde el puente,  para evitar así construir un puente que lo superara en belleza, o quizás porque nunca podría volver a construir algo tan sublime.


     Esto solo es una historia más que nutre la ciudad de Ronda, la realidad es bien distinta y también menos romántica, ya que este arquitecto, que nació en Teruel murió en Málaga en 1802, entonces estando ya arruinado.


     El puente es el punto estratégico del lugar, construido en forma de acueducto con sillería de piedra, su estructura es a base de arcos de medio punto que deja abiertos tres ojos que nos permiten intuir una primera instantánea de la ciudad que aguarda, su recorrido sirve para unir los dos barrio, el casco antiguo de origen árabe y la ciudad actual.



     Las chovas piquirrojas y algún que otro cernícalo volaba entre las piedras de aquella impresionante edificación, a los pies del tajo observábamos la ruinas de las Murallas de Albacara, Puerta del Viento y de los Molinos, también llamada el Arco del Cristo, era por donde pasaban diariamente los vecinos para trabajar en los molinos y almazaras, el nombre le viene porque existía una capillita incrustada a la derecha de la puerta donde los trabajadores tenían a su Santo el Cristo Crucificado alumbrado diariamente por una lamparita de aceite hasta 1955 cuando el abandono de estos lugares es inminente.



    Atravesamos el puente hacía el balcón nororiental desde donde podemos contemplar otras maravillas rondeñas, las Casas Colgantes que se asoman a las dos orillas del gran corte, más tarde tomando la pronunciada cuesta bajamos hacia el Puente Viejo o Puente Romano, pasando por el Palacio del Rey Moro y el Palacio de Salvatierra, que en esta ocasión no visitamos.





     Continuamos atravesando la Puerta del Felipe V  pasando por el Centro de Interpretación del Arrabal Islámico hacía los Baños Árabes lo visitamos, pero nada comparados con los que poseemos en Jerez de la Frontera, la entrada bastante cara, muy pequeño y los hallazgos encontrado repartidos desordenadamente por el supuesto jardín, éste lamentablemente no poseía belleza, ya podían arreglarlo y decorarlo de forma que llame un poco más la atención, en fin esta hecho de forma que le saca los cuartos a los turistas, los Baños Árabes de nuestras provincia son más grandes, estéticamente conservados y su recuperación ha merecido la pena, gratuitos si los visitas en las Fiestas de Navidad.



Alfeñique Andaluz - Centranthus Macrosiphon


     Continuamos cuesta bajos tomando el Camino de las Culebras, desde donde teníamos unas buenas perspectiva de la Iglesia de Espíritu Santo, como nos llovía en aquel momento, pero el agua no nos impedía seguir adelante con el itinerario marcado, además el agua embellecían el lugar y los pequeños caracoles salían de sus moradas, íbamos bien equipados con nuestros chubasqueros.

Almendro en Flor - Prunis Dulcis


     Bajo la intensa lluvia subíamos la Avenida de Argentina hasta las puertas antiguas, la de Carlos V,  de estilo renacentista del S. XVI, que se encuentra ubicada junto a la Puerta de Almocabar, de estilo musulmana, accedimos a las murallas y a las torres, desde donde oteábamos todo el Barrio de San Francisco y las murallas de los Salesianos.






      Más tarde llegábamos a la Iglesia de Sta. María la Mayor después de pasar por el Minarete de San Sebastián y llegar a la Plaza de la Duquesa de Parcent donde está el Ayuntamiento.




     Dimos por terminada el itinerario cultural, era hora de almorzar, tomamos el Callejón de los Tramposos buscando el coche, que era donde teníamos la comida que bien temprano de mañana habíamos preparado antes de salir de casa, la sabiduría popular siempre pone nombres curiosos a las calles, en este caso sabíamos que andábamos en tierras de bandoleros.


     Con la cesta del picnic volvimos a la alameda bajo un terrible aguacero, poco después y sobre el cantillo de uno de los jardines dispusimos las viandas, en el Tajo de Ronda la magia es inagotable, hay días en los que el viento sopla tan fuerte que incluso llegan al puente algunas gotas de agua del río, por eso en la ciudad se dice que “aquí a veces llueve para arriba”, pero en esta ocasión llovía hacía abajo y mucho.

     Después del acelerado almuerzo pensamos que lo más adecuado era regresar a casa, cuando entrabamos en la provincia gaditana ya el sol brillaba la tarde la pasamos paseando por nuestro pueblo.

Hasta l próxima amigos/as.






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